martes, 31 de agosto de 2010

Horas previas a un examen

Las horas previas a un examen siempre son horribles. Y más en un examen importante.
Nunca hay nada que perder pero sí mucho que ganar.
En cada examen casi se da la vida, por ello las horas previas deben llevarse bien.
En las horas previas siempre hay dudas de si el contenido que se ha estudiado es el correcto (a buenas horas surge tal duda) de si lo hemos estudiado todo (siempre hay algo que te dejas) o de si hacemos bien en presentarnos o no.
Antes del examen empiezan los nervios y entramos en trance, la sensación de pánico llega a ponernos en situación de estrés, por lo que el cerebro decide bloquearse. Y hay dos soluciones: o te tranquilizas y todo saldrá como Dios quiera, o pones en marcha las piernas y te vas.
Odio el mes de septiembre, mucho más que febrero y más que junio, por la sensación de que el curso dura una eternidad, que tras los exámenes tendré solo una semana para hacerme a la idea de que empiezo otro curso en el que volveré a dejarme asignaturas para septiembre y en el que también me quedarán asignaturas.
Aún así, adoro la vida universitaria.
Mañana (o pasado) tendré mi primer examen, y para empezar bien la época de repesca lo hago con un oral de una asignatura ... por así decirlo, poco querida, no por el temario, Derecho Internacional es interesante, sino por el enigma que envuelve a la forma de aprobar esa asignatura.
Espero aprobarla por fín y poder decir dónde está la clave.

Un besako

miércoles, 18 de agosto de 2010

Ecuación de la felicidad

Punset nos da su ecuación para poder calcular el grado de felicidad de un ser humano en un momento dado en su libro ¨El Viaje a la Felicidad¨. Aunque podríamos precisar más y decir: “la felicidad de un sistema biológico”, puesto que el autor sostiene que los animales también pueden ser felices, incluidos los unicelulares, como las amebas, por ejemplo.

La fórmula en cuestión es: Fórmula felicidad

Donde F es la felicidad; E las emociones implicadas en nuestras acciones; M los recursos y el coste energético del mantenimiento de nuestro organismo; B es la búsqueda de nuevos horizontes (intelectuales, emocionales, profesionales, etc.);P es el parámetro que define las relaciones interpersonales. R sería el símbolo que representaría a los factores externos reductivos de la felicidad, como por ejemplo: no desaprender los conocimientos y las experiencias innecesarias, nefastas o lesivas, el adoctrinamiento grupal (en el que Punset incluye a las religiones), los procesos de aprendizaje automatizados que dejan sin iniciativa al sujeto, y un predominio injustificado del miedo emocional por encima de las exigencias del estado de alerta necesario para la supervivencia. Finalmente, C sería el representante de los factores internos que llevan a la disminución de la felicidad, tales como: las mutaciones genéticas lesivas que producen enfermedades congénitas, el desgaste celular y el envejecimiento que conducen a la muerte, el estrés imaginado y, curiosamente, el ejercicio abyecto del poder.

Según Punset, esta ecuación es tan importante que: “dentro de unos años, el sistema educativo enseñará a los niños que el primer paso en la búsqueda del bienestar radica en aligerar el denominador integrado por los factores reductivos y la carga heredada” .

Tal vez no nos de un valor numérico: ¿cómo calcular las necesidades? ¿y los sentimientos? Tal vez en la B (búsqueda de nuevos horizontes) si se pueda establecer un número (por orden prioridad).

Sea como sea, al menos esta ecuación puede hacer pensar a las personas que se acerquen a ella la forma en la que están estructurando su vida, yo al menos siempre intento pensar paso a paso el orden de prioridades y mis objetivos a alcanzar, el resultado .. aún está por llegar. Tengo 22 años tal vez sea pronto, peor si no piensas en lo que necesitas para ser feliz, jamás lo podrás alcanzar. Y no sólo eso, si no también en la forma de llevarlo a cabo.


domingo, 15 de agosto de 2010

... mucho tiempo sin escribir pero no por falta de ideas...

No es por falta de ganas, ni por vaguería, por tiempo .. tal vez, ni en verano me sobra.
Un consejo a los universitarios: alegraros del plan bolonia, no os dejarán el típico ¨esta pa´septiembre¨; que después os pasará lo que a mí, que aparte de esas tengo las suspensas :)
Al menos los temas no me faltan: felicidad, amor, amistad, Dios, esfuerzo ... me falta ordenar un poco mis ideas y saber de qué quiero escribir.
Disculpen las molestias.
Un abrazo muy fuerte